En el 2007 Pluspetrol Norte implementó el Programa de Monitoreo Ambiental Comunitario (PMAC) en la zona del Bajo Corrientes, donde se ubica el Lote 8, cerca de la frontera con el Ecuador. El PMAC fue creado con la participación de monitores ambientales de las etnias Achuar y Urarinas y la ONG ProNaturaleza, para fortalecer las relaciones con las comunidades mediante la capacitación continua, monitoreo participativo y apoyo a iniciativas de proyectos de desarrollo sostenible, la recuperación de los recursos hidrobiológicos de la cuenca media y baja del Corrientes (repoblamiento de dos especies en peligro de extinción la tortuga Taricaya Podocnemis unifili y caimán negro Melanosuchus niger).
Trabajo en equipo
ProNaturaleza y Pluspetrol forman una alianza para crear una entidad formada íntegramente por pobladores de la zona para dar el norte a este proyecto. El PMAC es la primera fuente de datos con la que cuentan las comunidades para estar informadas sobre la situación ambiental de la zona. “Este programa está enfocado en la observación y registro directo de ocurrencias o hallazgos que tengan incidencia en el agua, suelo, vegetación y fauna silvestre. El monitoreo ambiental es realizado por 18 monitores que verifican e informan sobre el estado del ambiente. Una de sus principales tareas es recorrer mensualmente los distintos lugares de operación de la empresa y, supervisar que todo funcione normalmente.
De encontrar algún incidente, elaboran un reporte que es enviado a las comunidades, la empresa y entidades públicas competentes. Asimismo, cada vez que se realizan pruebas fisico-químicas en un laboratorio externo, la comunidad participa activamente como observadora a través de sus monitores. “Además, nos permite participar activamente en la conservación de la biodiversidad, como el repoblamiento de taricayas (tortugas) y caimán negro, que están en peligro de extinción”, explicó Armando Sandi Hualinga, monitor de la comunidad nativa de Pucacuro.
Comunicación constante
Uno de los principales atributos de este proyecto es que existe un fluido entendimiento entre las comunidades y Pluspetrol de proteger y cuidar el medio ambiente. Bajo este contexto, el PMAC permite también la capacitación de la población en la disposición de residuos, se conformaron comités ambientales en catorce comunidades, se instalaron microrellenos sanitarios, se limpiaron las riberas de los riachuelos y las cochas de la zona, y se instalaron casetas de acopio de basura.
Los monitores reciben constantes capacitaciones para que mejoren sus aptitudes comunicativas y fortalezcan sus capacidades técnicas. El trabajo que se realiza incluye la formación de pescadores responsables y conscientes de la importancia ecológica de las cochas.
Hoy, esta actividad se realiza de forma sostenible y cuenta con líneas de bases, zonificación pesquera y planes de manejo en cinco comunidades.
Por último, en los años trabajados se ha logrado la liberación de 11 759 taricayas desde el 2009 al 2013 (promedio de 2333 crías/año) con un éxito de eclosión del 79% de un total de 14 841 huevos reanidados. 8 481 tortugas fueron a dar a estanques seminaturales beneficiando directamente a 398 familias dueñas de los estanques distribuidas en ocho comunidades y 3278 tortugas fueron soltadas en cochas de 7 comunidades beneficiando indirectamente a 734 familias. Entre abril a junio del 2014, en visitas realizadas tanto a cochas como estanques se pudo avistar 1026 individuos de taricaya de diversos tamaños. Este 8,72% de la población liberada, es un buen indicador de la sobrevivencia de los especímenes liberados.
El PMAC del río Corrientes es una muestra de cómo comunidades enteras pueden ser partícipes del cuidado de su región y convertirse en observadoras y guardianes de su patrimonio ecológico, manteniendo siempre un diálogo fluido y amigable con las grandes empresas mineras y de extracción de hidrocarburos.
Cabe señalar que esta iniciativa de la compañía Pluspetrol Norte S.A. obtuvo el Premio Desarrollo sostenible 2014 (en la categoría Gestión Ambiental en el sector Hidrocarburos) que realiza la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) a fin de reconocer las actividades de responsabilidad empresarial que se realizan en el sector minero-energético.